Emprender sin apenas capital puede sonar imposible, pero en la situación actual y con el auge de la tecnología, es cada vez más frecuente iniciar un proyecto con recursos propios, en lugar de buscar financiación externa. A este fenómeno se lo conoce como Bootstrapping.
Sin embargo, el término bootstrapping es mayoritariamente usado en el mercado anglosajón. El origen etimológico de este término se encuentra en una popular frase política estadounidense que se pronunció en 1834, “Levántate por tus propios medios”.
Aunque el término que ha popularizado recientemente, específicamente se comenzó a poner de moda en EE. UU. a raíz de la crisis económica mundial que se produjo en el año 2008, esta estrategia lleva décadas poniéndose en práctica.
Los negocios basados en bootstrapping suelen depender del esfuerzo y tiempo invertido por parte de los fundadores. Pero, como todo modelo de negocio, también tienen sus ventajas e inconvenientes.
Ventajas
- Control: los emprendedores tienen todo el control, al no disponer de financiación externa.
- Ahorro: se dispone de un total control de los costes, por lo que, la limitación de recursos puede conllevar a una reducción de costes y favorecer una rentabilidad rápida.
- Gestión inteligente: los recursos se gestionan siempre de manera inteligente y apostando por las acciones con mayor rentabilidad.
- Creatividad: al tener que buscar formas creativas de hacer las cosas, los emprendedores acaban dando con ideas innovadoras que los pueden diferenciar de la competencia.
- Aprendizaje: el bootstrapping se basa en el principio de Do It Yourself (DIY), y el aprendizaje continuo es una de sus mayores constantes.
- Rentabilidad: al gestionar una gestión de recursos inteligentes, los emprendedores pueden obtener un gran beneficio a corto plazo si lo hacen con éxito.
Inconvenientes
- Riesgo: el emprendedor asume todo el riesgo financiero del negocio.
- Recursos limitados: con la poca inversión, los recursos son limitados. Esto puede llevar a la frustración o ser arriesgado por no poder maniobrar ante imprevistos.
- Sobreesfuerzo: el exceso de tiempo invertido en el proyecto para compensar la falta de recursos puede ser perjudicial para la salud.
- Crecimiento: la falta de recursos puede limitar el ritmo de crecimiento.
- Margen financiero: el límite de recursos hace que solo se pueda usar esta estrategia en proyectos pequeños o que no dependan de muchos recursos.
- Problemas de imagen de marca: las limitaciones pueden ser percibidas por clientes y proveedores y tener un efecto negativo sobre la imagen de marca.
El Bootstrapping en emprendimiento
Este modelo de negocio encaja mucho con el espíritu emprendedor, pero hay que tener en cuenta que, al tener pocos recursos, hay que tener muy claros los pasos a realizar. A continuación, mencionamos algunos puntos clave si quieres seguir esta estrategia:
- Estudio inicial: realizar un estudio inicial de mercado para validar la idea.
- Plan de negocios: elaborar un plan de negocios para marcar unos objetivos, ver los puntos fuertes y débiles y trazar una estrategia.
- MVP: es primordial el lanzamiento de un MVP para validar la idea, tener feedback y obtener los primeros beneficios.
- Financiación creativa y control de costes: ser creativo a la hora de buscar financiación, así como tener un control estricto de los costes.
- Marketing de bajo coste: para dar a conocer el producto, se pueden usar métodos gratuitos, como las redes sociales.
- Adaptación al cambio: al disponer de poco margen de error, se deben tener alternativas para reaccionar y adaptarse a los posibles cambios.
- Sacrificio: asumir que se va a tener que invertir más tiempo del que gustaría, sobre todo en los inicios.
- Inversión inteligente: decidir sabiamente en qué áreas invertir los pocos recursos de los que se dispone. Suele ser bueno potenciar aquellas acciones que puedan ofrecer un mayor retorno de la inversión (ROI).
- Innovación: encuentra maneras poco habituales de conseguir tus objetivos.
Como veis, el bootstrapping tiene algunos inconvenientes y se basa en hacer más con menos. Emprender es complicado, y hacerlo con pocos recursos, mucho más. Aun así, se puede hacer, con mucho esfuerzo, constancia y una estrategia clara e inteligente.
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Fuente: Santander Open Academy
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