Hay términos en el ecosistema emprendedor que pueden confundirse o usarse como sinónimos, aunque no lo son. En el caso de hoy, hablamos de los términos startup y scaleup.
No existe una definición exacta de scaleup, ya que las características que la distinguen de una startup, varían según el tamaño del contexto de referencia, sector o modelo de negocio (B2B o B2C).
Aun así, una scaleup puede definirse como una empresa innovadora que ha desarrollado su producto o servicio, tiene un modelo de negocio definido y ciertas características de éxito y rentabilidad. Todas las características mencionadas, le permiten a una scaleup aspirar a crecer internacionalmente en términos de mercado, negocio, organización y facturación.
Además, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), “una scaleup es una compañía que ha crecido a un ritmo anual superior al 20% en número de empleados o en facturación durante los tres últimos ejercicios”.
Por otro lado, la Startup European Partnership (SEP), una plataforma paneuropea de innovación abierta dedicada a transformar startups en scaleups, cuenta con un esquema que se puede utilizar para definir una scaleup, diferenciarla de una startup y estandarizar ciertas métricas:
Startups: empresas que han levantado inversiones de entre 500.000 y 1 millón de dólares en los últimos 3 años de actividad o que se autofinancian y tienen una facturación en el mismo rango.
Scaleups: empresas que han levantado en los últimos tres años de 1 a 100 millones de dólares en inversiones o se autofinancian y tienen ingresos en el mismo rango.
Asimismo, algunos dividen las scaleups en 3 categorías:
- Scaler: empresas con una facturación de al menos 1 millón de euros en los últimos tres años.
- Growth: empresas que superan los 10 millones de facturación.
- Rocket: empresas que facturan por encima de los 50 millones de euros.
En resumen, una startup se convierte en una scaleup una vez ha validado su modelo de negocio y ha resuelto los desafíos de asentamiento, producto y estructura. Por ello, una scaleup es una startup que ha alcanzado una masa crítica y está lista para ser un contribuyente relevante para la economía, ya sea con la generación de ingresos o puestos de trabajo.
También es interesante saber cuántas startups se convierten en scaleups. Según el informe Scale-up: The Experience Game realizado por THNK y Deloitte Fast Ventures en 2018, que analizó los factores de éxito de 400 startups de 24 países diferentes, una startup de cada 200 (tras los primeros 5 años de vida) se convierte en scaleup. Por lo tanto, y según el informe, solo el 25% de las startups se han diseñado para escalar.
Las scaleups son el signo más concreto de madurez y nivel de innovación de un ecosistema económico.
Fuente: CaixaBank
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